
«Estar en la residencia Pío XI ha hecho el proceso de la oposición más sencillo y ameno»
Con 29 años, Xosé Ferreiro tiene un currículum difícil de igualar. Aprobó la oposición de Técnico de Hacienda con 23 y en junio, ha sido el número uno de su promoción de Inspector de Hacienda. Trabajó durante tres años en Sabadell como técnico y después pidió traslado a Madrid para estar más cerca de la familia. Ya en la capital, decidió presentarse a las oposiciones de Inspector mientras seguía trabajando. Eligió la residencia Pío XI para vivir durante los meses más duros de la oposición porque le habían hablado de su seriedad y gran ambiente de estudio, además de estar situada a diez minutos de su trabajo. Como recién llegado a Inspección de Hacienda tiene que realizar un curso obligatorio de un año en el instituto de fiscales, después, le gustaría dedicarse a la fiscalía internacional.
Uno de tus grandes referentes a la hora de lanzarte a hacer una oposición fue tu abuelo materno, Carlos Costas, que ejerció como técnico de Hacienda y más tarde como asesor fiscal en la provincia de Lugo.
Sí, desde pequeño me llamaba la atención el tema fiscal por mi abuelo. Con él tuve muchas conversaciones profundas, veía lo que él hacía, me contaba lo importante que es, en el caso del derecho tributario, entender lo que pasa por detrás y cómo te permite entender en última instancia lo que está pasando en el fondo. Porque solo teniendo la operación o el caso concreto podemos entender luego la consecuencia tributaria. Entonces, me parece que es una herramienta que nos permite entender a fondo la realidad que nos rodea, ya que lo tributario no deja de ser una consecuencia de las cosas que pasan en la vida real. Esto a mí me inspiraba y también ver el tipo de gente de la que se rodeaba, gente muy culta, empresaria y del mundo de las ideas.
Aprobaste la oposición de técnico de Hacienda con 23 años y ahora has quedado primero de tu promoción al aprobar la de Inspector, estudiando sólo año y medio. Con estas credenciales seguro que a más de un opositor le gustaría saber que consideras imprescindible para aprobar una oposición.
La constancia, en todo momento. Estar con la misma dinámica tanto los días malos como los buenos. Mantenerse recto, constante, a largo plazo genera ese interés compuesto que nos ayudará a aprobar, sin duda, la oposición. Otro consejo que daría es saber enfocar bien el estudio. Cada vez que hagamos algo, saber por qué lo hacemos, ya que es fundamental, no solo trabajar duro, que eso ya se da por hecho en una posición de este nivel, sino también y sobre todo el saber en cada momento cuál es la razón por la que hacemos las cosas. En mi opinión, eso es fundamental para poder conseguir el objetivo en el menor tiempo posible.
Parece que, después de aprobar, lo último que uno quiere es, pasados tres años, ponerse a estudiar de nuevo otra oposición ¿por qué decidiste presentarte a Inspector de Hacienda?
Principalmente por tener un reto personal. La vida es proponerse retos y superarlos en todo momento y para mí este era uno más, el confirmar que era capaz de hacerlo. Y también, por supuesto, por el avance profesional, por mayor responsabilidad, por optar a tener mejores oportunidades en el futuro.
«Mantenerse recto, constate, a largo plazo genera ese interés compuesto que nos ayudará a aprobar la oposición»
¿Cómo viviste la preparación de tu última oposición, la de Inspector de Hacienda?
La verdad es que ha sido un proceso intenso y duro. Tuve que compaginarlo con el trabajo de técnico de Hacienda, ya que he aprobado por promoción interna. Estar en la residencia Pío XI me ha ayudado al proceso haciéndolo más sencillo y ameno. Además, está ubicada muy cerca de mi trabajo, que para mí es fundamental en una ciudad tan grande como Madrid. El tener la comida, la limpieza, el tener en general todo a tu disposición y que todo sea fácil para centrarte únicamente en lo que es la oposición, pues es fundamental. Trabajar a la vez que estudias es algo que te quita mucho tiempo y todo lo que es liberarse para tener las máximas horas de descanso posibles o para tener un poco de ocio, pues es increíble y fundamental en todo momento, así que, en ese sentido, aporta mucho. También contribuye la amabilidad del personal y las instalaciones, que están muy bien y son muy modernas.
Además, el ambiente de la residencia es muy bueno, en el sentido de que estás con gente que está en la misma situación que estás tú. En la vida tienes muchos amigos y familiares, que por mucho que nos quieran ayudar, es muy difícil que te entiendan al cien por cien. Y aquí tienes gente que te va a entender y te va a apoyar y darte aquello que tú necesitas. Además de estudiar muy, muy a tope poder tener esa dinámica social que, sin duda, es increíble para poder llevar bien el proceso.

En el camino para aprobar una oposición ¿Qué papel juega el preparador o los preparadores?
El preparador puede ser una figura realmente potente en el caso de que tengas la suerte de tener un preparador bueno y con el que te sientes en confianza. Esta figura puede ser alguien que te potencia, que confía en ti, alguien con que puedes crecer y llegar a un cierto objetivo. Es muy importante plantearse esta figura, confiar en él y no estar con cualquier persona solo por el hecho de estar en una dinámica de estudio concreta, sino elegirlo y tener una sintonía.
¿Cómo es tener 23 años, aprobar la oposición de técnico de Hacienda y darte cuenta de que tienes la vida resuelta?
La verdad es que fue un sentimiento increíble, sobre todo en cuanto a que te cambia la vida por completo, pasas a ser independiente, pasas a otra fase de la vida en la que las preocupaciones cambian. Sin duda, es un cambio de mejoría de vida, cambio de ciudad, en todos estos sentidos fue una felicidad inmensa.
Por otro lado, tener ya una plaza fija en la Administración ¿es sinónimo de hacer el mismo trabajo durante toda la vida?
No, en la Agencia Tributaria no es así, ya que gracias a las dinámicas y cómo funciona actualmente la oposición nos permite tener un gran rango de trabajos a los que podemos aspirar. Es muy raro que te puedas cansar con tantos departamentos, tantas cuestiones distintas a las que puedes optar, incluso trabajar en el extranjero, en consulados. Al final, depende más de tu curiosidad que de otra cosa. Y todo ello también sin perjuicio de que, cualquier persona con esta oposición, se pueda pedir una excedencia. Es una formación que en el sector privado se valora muchísimo. La realidad es que hoy en día muchos inspectores de Hacienda están en la empresa privada, en asesorías y también, pues con puestos de trabajo muy apetecibles y con buenos salarios. Entonces al final la curiosidad depende de cada uno. Aquí no te limitas, sino que te expandes sin ningún tipo de dudas.
«Es muy importante elegir un preparador por la confianza que te genera y no solo por estar en una dinámica de estudio concreta
Después de estar tantos años estudiando, habrás cogido el verano con ganas ¿vas a celebrar tu plaza de inspector de Hacienda yéndote de vacaciones a algún lugar especial?
El problema es que cuando estás trabajando y estudiando a la vez, te gastas días de vacaciones para estudiar. Entonces, pues no quedan muchos y hay que estar aquí trabajando, pero tener “solo” que trabajar es una liberación, tienes de nuevo tiempo para para retomar hobbies que estaban pendientes, así que este verano será un poco más de relax, pero sin vacaciones especiales.
¿Cuáles son esos hobbies que tienes pendiente retomar?
Muchísimos. El baloncesto, el pádel, el tenis, la guitarra y muchísimos. De hecho, es curioso cómo después de la oposición tienes 3 o 4 hobbies más. Yo creo que es porque hay que recuperar el tiempo.
Como Inspector de Hacienda te gustaría dedicarte a la rama de la fiscalía internacional ¿en qué consiste este trabajo?
Esta Oficina Nacional de Fiscalidad Internacional es una oficina que, en esencia, forma parte de la inspección tributaria y que analiza la tributación de los no residentes en España y otras cuestiones varias relacionadas con los no residentes.
¿Cómo te ves dentro de diez años, tienes ya pensado tu próximo reto?
Mi siguiente meta probablemente sea avanzar y crecer profesionalmente. En esta oficina fiscal internacional en la que me gustaría estar y también profundizando en idiomas, en el conocimiento tributario y en la realidad internacional que existe actualmente. Y también me veo en nuevas experiencias. Pero bueno, nunca se sabe. Al final este mundo es muy complejo y hay que verse en el día a día para luego poder actuar. Pero la parte positiva es que habrá tantas opciones que sé que estaré bien, sin ninguna duda.
Para terminar, una pregunta que, trabajando en Hacienda, te la harán mucho ¿cuál es el sector laboral en el que más se defrauda?
Sin duda los que más defraudan creo que son las grandes fortunas, sean del sector que sean, gente que tiene la capacidad económica y financiera para poder tener flexibilidad y poder optar a realidades que la gente de a pie, no. Nuestro trabajo es fundamentalmente tener herramientas para poder comprobar a esta gente, que sin duda es el mayor reto que se plantea no solo en España sino a nivel internacional. Al final ¿cómo luchar contra el fraude? Generalmente es gente muy bien asesorada, gente que sabe lo que hace y, por tanto, este colectivo, en mi opinión, es el que supone un mayor reto para nosotros.